La transición energética supone un cambio estructural en los sistemas de energía y se ha convertido en una necesaria e importante fuente de cambio para una sociedad sostenible.
El consumo de energía de nuestra actividad diaria ha estado formado principalmente de recursos fósiles, no renovables y contaminantes. Pero, los recursos fósiles no son inagotables y la degradación socioambiental ha hecho que comprendamos la necesidad de cambiar nuestro modelo energético.
Este cambio estructural debe partir de una decisión política y de la colaboración de entidades privadas y ciudadanos. Por ello, están surgiendo normativas como el primer proyecto de Ley de Cambio Climático y Transición Energética, que velará por el acceso y la utilización de una energía sostenible para la sociedad y el planeta.
Este primer proyecto legislativo tiene como objetivo que España alcance la neutralidad de emisiones no más tarde de 2050.
Objetivo de la Ley de Cambio Climático y la Transición Energética
- Garantizar el cumplimiento de los objetivos del Acuerdo de París, en el que se contempla mantener el aumento de la temperatura por debajo de 2ºC
- Facilitar el proceso de descarbonización de la economía española, para garantizar el uso racional y solidario de los recursos
- Promover la adaptación a los impactos del cambio climático y la implementación de un modelo de desarrollo sostenible
Objetivos para la neutralidad climática o huella de carbono cero
- Las emisiones de la economía española deberán reducirse en al menos un 20 % respecto del año 1990
- Alcanzar un sistema eléctrico de al menos un 70% de generación a partir de energías de origen renovable
- El consumo final de la energía deberá ser un 35 % de origen renovable
- Mejorar la eficiencia energética disminuyendo el consumo de energía primaria en, al menos, un 35 %
- España debe alcanzar la neutralidad climática con la finalidad de cumplir los compromisos internacionales asumidos, no más tarde de 2050
Para que sea posible sustituir los recursos fósiles por fuentes renovables es una parte muy importante de la transición energética, deben existir previamente infraestructuras para el almacenamiento de energía, su distribución y la mejora de las redes de transmisión son necesarias para poder llevarlo a cabo este cambio.
Por esta razón, es posible que en los próximos años vivamos una profunda modificación del sector energético y será un elemento clave para evitar los desastres ecológicos y sociales, haciendo posible un futuro sostenible.
Carolina Morales, Especialista en diseño y marketing digital
